Policía de Nueva Guinea captura a Banda los “Kusuqueros” y los “Milpa”

En una conferencia de prensa, con la presencia de funcionarios del estado, la Policía de Nueva Guinea, a través del comisionado Eric Salazar, segundo jefe departamental de Zelaya Central; el comisionado Ramón de Jesús Castillo, Jefe de la Policía de Nueva Guinea y el comisionado Héctor Wilson, segundo jefe de la localidad,dieron a conocer el trabajo ejecutado en los últimos días con el que desarticularon dos bandas delincuenciales llamadas los «Kusuqueros» y los «Milpa».

El uniformado dijo que con el trabajo arduo que han emprendido en los últimos días en la zona rural han tenido buenos éxitos desarticulando las dos bandas antes mencionadas, que se dedicaban a robo con intimidación, asalto y secuestro.En el operativo capturaron a Fredy Antonio Oporta Molina (alias el Salvadoreño) e Hilario Martínez Flores (alias el Kusuquero), el primero habitaba en la zona de las Milpa y el segundo en la colonia la Esperanza, quienes lograban mayores ingresos cuando los demás integrantes juntos realizaban las actividades.

Aún falta la captura de cuatro personas que ya están circuladas. El apoyo lo conseguían a través de colaboradores, quienes les informaban sobre el movimiento de los comerciantes.Los jefes del grupo, Fredy Oporta Molina e Hilario Martínez Flores,poseen antecedentes delictivos, pero gozaban de libertad.Martínez fue detenido en un vehículo en la ciudad del Rama donde pretendía organizar el robo con intimidación a una señora en puerto La Esperanza, pues llevaba un arma. Fue detenido en su momento cuando se movilizaba en un taxi de Nueva Guinea.Mientras que Oporta en el año 2012 interceptó un bus en la comarca las Milp donde quitó un arma, además de dedicarse al delito de abigeato.

Operaban en total 18 personas, los que seleccionaban a sus víctimas como comerciantes de ganado, vendedores de camiones lecheros que pagan semanal en las colonias. Se caracterizaban por usar una motocicleta, vestimenta camuflaje y pasamontañas.La operación se hizo a través de oficiales de inteligencia, estos se cruzaban el municipio mientras tenían las armas enterradas en la comarca la Esperancita. «Aclaro que no hay grupos armados, eran grupos delictivos», detalló Salazar.

Añadió que las armas que utilizaban para delinquir eran tres escopetas, un fusil Gali, un fusil AK y una pistola de 18 tiros.Una de estas escopetas es la que le quitaron al vigilante asesinado.El uniformado dijo que esta acción fue también «gracias al apoyo de la población pues confían en que no le estamos dando tregua a la delincuencia ni al crimen organizado, nuestro municipio es seguro», finalizó.

Janeth Oporta