BAGDAD (AP) Más de 140.000 iraquíes han huido de sectores de la provincia de Anbar a causa de los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y extremistas de al-Qaida, en el peor desplazamiento de civiles en años, afirmó el viernes un funcionario de las Naciones Unidas.
El portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Refugiados, Peter Kessler, lo caracterizó como el desplazamiento «más numeroso» presenciado en Irak desde la violencia sectaria de 2006-2008. Agregó que sólo en la última semana, más de 65.000 personas huyeron del conflicto.
Desde fines de diciembre, miembros de la rama de al-Qaida en Irak conocida como Estado Islámico de Irak y el Levante han ocupado partes de Ramadi, la capital de la provincia de Anbar, de mayoría suní. También controlan el centro de la ciudad cercana de Faluya.
Kessler dijo que muchos civiles están sitiados y padecen de la escasez de víveres.
«Muchos civiles no pueden salir de las áreas afectadas por el conflicto donde los alimentos y el combustible escasean», precisó.
Los llamados al ministerio de justicia de Irak para confirmar el éxodo no fueron respondidos el viernes, el comienzo del fin de semana en el mundo musulmán.
Algunas familias desplazadas han terminado en edificios abandonados, escuelas y casas en construcción, mientras otros se han refugiado con familiares. Las agencias internacionales de ayuda instaron el miércoles a las partes en pugna a permitir que la asistencia humanitaria llegue a las víctimas.