ANKARA, 23 enero 2014 (AFP) – El gobierno turco siguió este jueves su purga en la policía con la destitución o el traslado de más de 160 agentes en la ciudad de Burs (noroeste), un mes después de que se revelara un escándalo de corrupción que salpica a allegados del régimen, informó la agencia Dogan.
Las autoridades destituyeron o trasladaron el miércoles a unos 600 policías en Ankara, Estambul e Izmir (oeste), y a cerca de cien magistrados de alto rango, jueces y fiscales, en todo el país.
Esta nueva purga se produce en medio del escándalo político-financiero desatado por una investigación judicial contra decenas de personas cercanas al primer ministro turco, el islamista moderado Recep Tayyip Erdogan.
Desde que estalló el escándalo, Erdogan emprendió una depuración sin precedentes en la policía y la justicia, a los que acusa de preparar un «complot» para desestabilizar a su ejecutivo, en el poder desde 2002.
Con esta nueva tanda de destituciones y traslados, ya son casi 2.500 los policías, desde simples agentes a altos oficiales, sancionados desde mediados de diciembre, según un recuento de la prensa turca.
Desde hace un mes, Erdogan acusa a sus exaliados de la cofradía del predicador musulmán Fethulá Gulen de estar infiltrados en la policía y la administración judicial y de haber manipulado las investigaciones anticorrupción contra personas cercanas al gobierno.
Turquía celebra elecciones municipales en marzo y presidenciales en agosto de este año.