Los médicos que intervinieron quirúrgicamente a la presidenta argentina, Cristina Fernández, han concluido la operación para drenar un hematoma cerebral.
La operación se prolongó poco más de hora y media. La presidenta se recupera de la anestesia en la Fundación Favaloro, acompañada de sus hijos. Tras la intervención, deberá permanecer al menos 48 horas en cuidados intensivos.
El equipo médico de la clínica diagnosticó el pasado sábado a la mandataria un hematoma craneal provocado por un raumatismo y le recomendó 30 días de reposo, pero el lunes decidió operarla después de haber detectado nuevos síntomas, como un hormigueo y una leve y transitoria pérdida de la fuerza muscular en el brazo izquierdo.
