Según la información difundida por la fiscalía federal en Denver, las plantaciones se detectaron en una zona a cargo del Buró de Administración de Terrenos (BLM) en el Condado Montrose, unos 425 kilómetros al oeste de Denver.
Una de las plantaciones se descubrió el pasado 15 de septiembre cuando alguien alertó al BLM sobre la presencia de actividades extrañas en una zona despoblada cercana al río Dolores entre las pequeñas localidades de Gateway (básicamente sólo una oficina de correos) y Naturita (con poco más de 600 habitantes).
En ese lugar, cuya ubicación exacta no se precisó, los agentes federales y los guardabosques encontraron más 1200 plantas de marihuana, además de 211 kilogramos de marihuana procesada.
Cuatro mexicanos, sospechosos de estar a cargo de las operaciones, fueron arrestados en ese plantío.
La segunda plantación se descubrió el 30 de septiembre y aunque en este caso, las miles de plantas de marihuana ya habían sido cosechadas, todavía había casi 70 gramos de marihuana procesada.
Las autoridades detuvieron allí a cinco mexicanos y a un hondureño, cuya exacta participación con el ilícito aún se desconoce.
La fiscalía federal indicó que, además de BLM, la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), el Servicio Forestal, el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) y alguaciles de los condados Montrose y Mesa participaron en los operativos.
En lo que va del año, se han detectado y destruido numerosos de estos plantíos ilegales en el oeste y en el sur de Colorado.
En julio pasado, el alguacil Shannon Byerly, del condado Custer, difundió un reporte advirtiendo sobre la presencia de carteles mexicanos en los bosques del sur de Colorado.
A finales de agosto, dos mexicanos indocumentados fueron detenidos en el condado Routt y luego acusados de cultivar más de mil plantas cerca del centro de esquí de Steamboat Springs en lo que se describió como una «sofisticada operación».
El 10 de septiembre, otros dos mexicanos fueron detenidos en el Bosque Nacional San Isabel cuando las autoridades llegaron a destruir otra plantación clandestina.
Pocos días después, el alguacil Bruce Newman, del condado Huérfano, advirtió que «por cada plantación ilegal de marihuana que detectamos y desmantelamos existen dos o tres plantaciones más que aún no hemos detectado».