Un debilitado huracán Joaquín pasó junto a Bermudas y se alejó por el Atlántico tras derribar árboles y provocar apagones en el rico paraíso financiero, que es también un importante destino turístico.
El aeropuerto internacional L.F. Wade del territorio británico se aprestaba a reanudar operaciones en las próximas horas, en tanto bancos y compañías de seguros abrieron sus puertas. La empresa de electricidad buscaba restaurar el servicio a 15.000 clientes que sufrieron apagones y se declaró feriado escolar mientras las cuadrillas despejaban las calles.
Tras azotar parte de Bahamas como huracán de categoría 4, Joaquín perdió intensidad en su desplazamiento hacia el norte. Sin embargo, seguía siendo un huracán de categoría dos al bordear Bermuda el domingo, con vientos de 160 kph (100 mph).
Mientras se alejaba de Bermuda el lunes, los meteorólogos en Estados Unidos dijeron que era una tormenta de categoría uno con vientos de 140 kph (85 mph), pero el Centro Nacional de Huracanes dijo que reinaban condiciones de tormenta tropical en el territorio situado a 965 kilómetros (600 millas) de la costa atlántica de Estados Unidos.
Muchos residentes y comerciantes aseguraron sus puertas y ventanas, pero otros estaban mucho menos preocupados en la dependencia británica habituada al clima violento. Al menos un bar en Hamilton, la capital, estaba atestado de gente que sobrellevaba el huracán con copas y amistades.
Grandes oleadas seguían afectando las Bahamas y la costa atlántica de Estados Unidos. En South Carolina se registraron inundaciones. El Centro Nacional de Huracanes dijo que el alto nivel del agua y las grandes olas afectarán la región atlántica media, «causando fuerte erosión en playas y dunas, con probables inundaciones moderadas. Las marejadas continuarán hacia el norte hasta la costa atlántica de Canadá.
En South Carolina, cientos de personas fueron rescatadas de las inundaciones provocadas por días de lluvias intensas, que dañaron edificios y rutas, incluida una interestatal costeña y amenazaron el suministro de agua potable de la ciudad.
HAMILTON, Bermudas (AP)