GUATEMALA (AP) Nueve hombres, entre ellos dos mexicanos, son juzgados desde hoy bajo el cargo de haber decapitado a 27 campesinos en mayo de 2011, supuestamente por disputa de territorio entre narcotraficantes.
El crimen fue ejecutado presuntamente por integrantes del grupo narcotraficante Los Zetas en la Finca Los Cocos en el Petén, unos 500 kilómetros al norte de la capital.Los acusados fueron identificados como José Luis Santiago Morales y Jorge Hernández Méndez, mexicanos, y los guatemaltecos Daniel Josué Castillo, Edwin Otoniel Sis de León, German Ico Chej, Elder Estuardo Morales, Luis Cal Roy, Hugo Álvaro Gómez, alias «Comandante Bruja», y Ludwin Celada Galdámez.
Según la investigación del Ministerio Público, los campesinos eran jornaleros de una fina propiedad de Otto Salguero, con quien los acusados se disputaban territorio para el narcotráfico. Los sindicados habrían llegado la noche del 14 de mayo de 2011 a la finca en busca de Salguero, pero ante la ausencia de éste torturaron a los jornaleros durante varias horas y luego los asesinaron.
Fotografías tomadas en la escena del crimen mostraron cadáveres regados por toda la propiedad, así como que las personas que ejecutaron el crimen usaron una pierna de una de las víctimas para escribir en una pared un mensaje de amenaza a Salguero.
El Ministerio Público dijo que presentará a 31 testigos, incluso uno protegido que aparentemente presenció los hechos, así como pruebas científicas, documentos y peritajes.Varios de los acusados han sido vinculados y condenados por otros crímenes relacionados con el narcotráfico.