Un hombre taciturno, solitario y contrario a la religión: así describían el viernes vecinos y familiares al autor del ataque que dejó el jueves 10 muertos -entre los cuales el tirador- y diez heridos en una universidad de Oregon, en el noroeste de Estados Unidos, quien poseía un verdadero arsenal.
La policía de la localidad de Roseburg aún se niega a identificar formalmente al responsable por los disparos en la Umpqua Community College, aunque según medios estadounidenses se trató de Chris Harper Mercer, de 26 años.
Celine Núñez, agente de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas (ATF) dijo que los peritos hallaron seis armas junto al cuerpo del atacante en el interior del centro educacional, y otras siete armas pesadas en su departamento.
Además, en la escuela los agentes hallaron un chaleco antibalas y cinco cargadores de armas automáticas.
La matanza provocó un dramático llamado del presidente Barack Obama para adoptar algún tipo de control de armas de fuego, pedido que el mandatario reiteró este viernes durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
Para Obama, la ausencia de iniciativas en este sentido es una «decisión política», porque grupos interesados la industria de armamentos que «financian campañas y alimentan el miedo en la gente».
El mandatario reveló que ya solicitó a su equipo de asesores que analice que tipo de autoridad tiene el poder ejecutivo para hacer aplicar leyes existentes «para poner las armas fuera del alcance de los criminales».
Roseburg, Estados Unidos | AFP