SAN JUAN, Puerto Rico (AP) Cientos de maestros en todo Puerto Rico abandonaron sus aulas el martes en un ruidoso paro de labores de dos días para protestar contra el recorte a sus pensiones que, según el gobierno de la isla, es necesario para evitar un desastre financiero; pero los educadores dicen que la medida empujará a muchos de ellos a la pobreza.
Los maestros se reunieron con panderos, cencerros y trompetas afuera de escuelas públicas de toda la isla en el primer día de clases después de la pausa invernal, obligando a muchas escuelas a cerrar. Legisladores del principal partido de oposición apoyaron la huelga y algunos directores de escuela y padres de familia se unieron, exigiendo que se revoquen los cambios al sistema de jubilación en el territorio estadounidense.Entre los manifestantes en una escuela estaba René Pérez, del dúo puertorriqueño de hip-hop Calle 13, ganador del premio Grammy.
Aída Díaz, presidenta de la Asociación de Maestros de Puerto Rico, condenó la ley que fue aprobada la víspera de Navidad y que ordena un cambio de un plan de prestaciones definido a un sistema de contribución definida, entre otros cambios. Señaló que los maestros en Puerto Rico no cobran Seguro Social de Estados Unidos, y que muchos van a ver una disminución en su pensión.
«Esta es la batalla más importante en nuestra historia», subrayó. «Se trata de proteger y defender la única fuente de ingreso que tenemos en la jubilación». Sólo 12% de los maestros empleados en escuelas públicas se presentaron a trabajar el martes, según el secretario de Educación Rafael Roman. Asimismo, menos de 200 estudiantes de un total de 425.000 asistieron a clases, agregó. En una escuela secundaria en el poblado sureño de Coamo, todos los maestros se pusieron en huelga, incluido Rolando Cartagena Ramos, de 42 años, quien imparte Historia y Ciencias Sociales.
Comentó que ha sido maestro durante 14 años y está considerando unirse a decenas de miles de puertorriqueños que se han mudado a la parte continental de Estados Unidos en años recientes en busca de mejores empleos y una vida más accesible. «Esta ley va a ser devastadora para nuestro futuro», dijo en entrevista telefónica. «Nos dejará prácticamente desamparados una vez que nos jubilemos».