El Gobierno de Estados Unidos cree que el narcotraficante mexicano fugitivo de la justicia Joaquín «El Chapo» Guzmán sigue en México y agentes estadounidenses están trabajando con autoridades mexicanas para recapturarlo, dijo el miércoles el jefe subrogante de la Administración para el Control de Drogas (DEA).
«¿Dónde está probablemente más seguro y más protegido? Probablemente en Sinaloa», dijo Chuck Rosenberg a periodistas en referencia al Estado de origen de Guzmán y dónde construyó su poderoso cartel de drogas.
Rosenberg dijo que agentes de la DEA están compartiendo información de inteligencia con sus pares mexicanos, pero que hay «problemas institucionales» en el país que hacen difícil reunir información.
«Tenemos fuentes en México con las que podemos trabajar de cerca. No se extiende a todo el Gobierno», dijo a periodistas.
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI), el Cuerpo de Alguaciles de Estados Unidos y el Departamento de Estado también se han involucrado, dijo Rosenberg.
El Departamento de Estado ofrece 5 millones de dólares por información que permita la captura de Guzmán, uno de los narcotraficantes más conocidos.
Guzmán escapó de una prisión de máxima seguridad a mediados de julio, a través de un túnel que llevaba a su celda.
Estados Unidos había pedido su extradición dos semanas antes del escape.
Rosenberg añadió que no se «sorprendió demasiado» al enterarse de que Guzmán había huido de la prisión, algo que ya hizo en 2001.
WASHINGTON (Reuters)