La construcción de una cerca con el objetivo de frenar el flujo de inmigrantes y refugiados que entran a Hungría por su frontera con Serbia, en el sur, se concluirá el 31 de agosto.
El portavoz del gobierno, Zoltan Kovacs, dijo el miércoles que el ministro de interior Sandor Pinter aseguró en una reunión del gabinete que terminarán para la fecha límite, que previamente estaba anunciada para el 30 de noviembre.
Según Kovacs, Pinter dijo que «la cerca de seguridad puede construirse en su totalidad en un mes».
Casi 100.000 migrantes y refugiados han entrado a Hungría en lo que va del año, comparados con los 43.000 que buscaron asilo en todo el 2014. En las últimas semanas, sobre todo desde que Hungría construyó una sección de prueba de la cerca en la frontera, el número de llegadas aumentó, con frecuencia superando las 1.500 personas diarias.
Kovacs dijo que el gobierno había destinado 22.200 millones de forintos (79,3 millones de dólares) para financiar su cerca de 175 kilómetros de largo (109 millas), además de los 6.500 millones de forintos que había reservado previamente.
Parte de los fondos se utilizarán para montar campamentos en áreas rurales para los migrantes y refugiados, que gradualmente reemplazarán viviendas en ciudades y pueblos.
Aproximadamente 80% de quienes buscan asilo ahora provienen de países destrozados por la guerra como Irak, Siria y Afganistán. La mayoría intenta llegar a destinos más al occidente en la Unión Europea, como Alemania u Holanda, antes de que se resuelva su petición de asilo.
Una campaña gubernamental que rechaza la migración y la relaciona con terrorismo, ha sido duramente criticada por la agencia de refugiados de la ONU y otros.
BUDAPEST, Hungría (AP)