Por lo menos 20 cuerpos fueron encontrados en la capital regional en el norte de Camerún, Maroua, después de que dos atacantes suicidas estallaran el miércoles en un mercado abarrotado y un vecindario popular.
Camerún, que es frontera con Nigeria y ha contribuido con tropas para la fuerza multinacional que lucha contra los rebeldes extremistas islámicos de Boko Haram, ha sido repetidamente atacado por la insurgencia.
«Aún registramos si hay más cuerpos porque muchas personas estaban en el mercado y algunas todavía están en tiendas», dijo el oficial Eric Bambue, quien describió la escena como lo peor que ha visto.
No hay detalles sobre los atacantes, pero dos ataques suicidas previos los han llevado a cabo mujeres, un distintivo del grupo militante que también utiliza ataques suicidas en Nigeria. Camerún recientemente prohibió que mujeres utilizaran el velo burka después de que atacantes suicidas los usaran para llevar a cabo explosiones en Fotokol, frontera con Nigeria.
Cientos de personas fueron heridas en el mercado abarrotado, dijo el comerciante local Ousmaila Toukour.
«Casi todos los bienes vendidos aquí son traídos de Nigeria y es muy probable que las bombas estuvieran escondidas en los bienes», dijo. «Creo que el mercado debería cerrarse y ser registrado».
El lunes, habitantes del pueblo Kamouna, en la misma región, dijeron que 80 miembros de Boko Haram atacaron y asesinaron a 23 personas durante la noche, muchos eran niños.
El grupo nigeriano Boko Haram, que este año se convirtió en la rama africana del grupo Estado Islámico, ha atacado constantemente a Camerún como represalia por su participación en un esfuerzo militar contra los extremistas. La semana pasada, bombas colocadas en un bar al norte de Camerún por supuestos combatientes Boko Haram mataron a 14 personas.
YAOUNDE, Camerún (AP)