Según datos que fueron dados a conocer hoy por la Fiscalía en Guatemala, 7,000 niños y adolescentes estuvieron involucrados en delitos en 2013, que es un aumento casi del doble de lo presentado en 2012. En la cifra se incluyen violaciones, asesinatos, secuestros y extorsiones ejecutadas por niños y adolescentes.
Acorde a los últimos datos suministrados por distintas autoridades, se conoce que muchos de estos infantes son reclutadas desde los 6 años para transportar narcóticos ilegales, armas y mensajes entre pandillas. Con este acercamiento al mundo criminal, el salto a convertirse en maleantes es prácticamente imposible de evitar.
Miles de guatemaltecos dejan de recrearse en los primeros años de su vida y saltan al vacío de la supervivencia en un ambiente de criminalidad, droga y muerte; obligados a practicar la ley del más fuerte en esa selva que para ellos se ha convertido la vida.
viceministro de Prevención y Niñez del Ministerio de Gobernación (Interior), Arkel Benítez.
La investigación a cargo de el viceministro de Prevención y Niñez del Ministerio de Gobernación (Interior), Arkel Benítez, arrojó que los muchachos de 13 a 17 años son forzados a cometer homicidios, lo cual forma parte de un ritual para demostrar filiación al grupo antisocial al cual pertenecen.
El funcionario ha precisado que los grupos dedicados al narcotráfico prefieren a menores y mujeres para la manufactura de estupefacientes ilegales, pues la finura de sus dedos les facilita el manejo de plantas como la marihuana y la amapola.
Según cifras oficiales, dos de cada tres adolescentes no asisten a la secundaria, situación que facilita el crecimiento de este fenómeno social que nace a raíz de ciertas condiciones desfavorables surgidas desde el hogar.
Cada año un promedio de 50 homicidios son perpetrados por menores en Guatemala, según estadísticas del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.
AGENCIAS