Una serie de especulaciones y versiones no confirmadas o desmentidas por autoridad alguna sobre la posible detención de un poderoso narcotraficante mexicano, que podría ser Joaquín El Chapo Guzmán, se desataron anoche luego del aterrizaje de una lujosa avioneta en una isla de Honduras.
La aeronave, un Lear Jet 25B, matrícula XB-LTD, aterrizó el jueves por la noche en la isla Roatán, 400 kilómetros al norte de Tegucigalpa con tres personas a bordo. Los dos pilotos huyeron de inmediato y las autoridades hondureñas lograron detener al pasajero, identificado como Víctor Alberto Calderón.
Las especulaciones subieron de tono cuando se confirmó que las luces del aeropuerto se apagaron en el momento en que la nave tocó tierra. Al pasajero detenido se le atribuye cierto nivel de poder e influencia por el sigilo y facilidades que le otorgaron en el aeropuerto.
Los pilotos, según las primeras investigaciones, tomaron un vuelo de Avianca rumbo a El Salvador y luego partieron al Distrito Federal. Fueron identificados como Carlos Rafael Ramírez y Enrique Gaona Areas.
El incidente se da en el contexto de máxima alerta que vive Honduras por la fuga de El Chapo. Medios locales especularon de inmediato que el detenido podría estar vinculado con la fuga e incluso que se trata del capo. La versión no ha sido confirmada ni desmentida por autoridades mexicanas u hondureñas.
Vivió El Chapo en Honduras
Las autoridades creen que Joaquín Guzmán Loera vivió algún tiempo en el oeste de Honduras. Mario Pérez, diputado del oficialista Partido Nacional de Honduras, dijo que un avión privado que aterrizó misteriosamente en el aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa en 2006 fue un regalo de Guzmán a un alto funcionario no identificado del gobierno del depuesto expresidente Manuel Zelaya. Esa nave, que nadie reclamó, la decomisó el Estado y finalmente la subastó en 736 mil dólares, aunque su valor era de 20 millones.
Agencias