La insólita fuga del líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, plantea muchas preguntas. Una de estas es, por ejemplo, ¿cómo el preso logró librarse de la pulsera electrónica rastreadora que le habían puesto en el penal del Altiplano?
La pulsera electrónica colocada a ‘El Chapo’ en el Centro Federal de Readaptación Social número 1 para monitorear su actividad en la cárcel, no funcionó correctamente porque su señal era impedida por el sistema de bloqueo para celulares del penal, informa ‘El Mañana’.
Según fuentes del Gabinete de Seguridad del gobierno federal, el brazalete rastreador fue proporcionado por las autoridades penitenciarias de Chihuahua, que es una entidad pionera en el uso de este tipo de dispositivos. En el marco de la estrategia planteada por el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), al colocársele la pulsera al capo proporcionaría un seguimiento permanente en el penal.
El medio detalla que durante el día ‘El Chapo’ no deambulaba mucho por el penal, sólo tenía derecho a una hora de luz solar, saliendo a un patio cercano a su celda, y hacia la zona de locutorios cuando se reunía con sus abogados. Las fuentes señalan que no se descarta la posibilidad de que Guzmán fuera consciente de que el brazalete podría ser detectado desde el exterior al concretarse su fuga, y por eso lo cortó con ayuda de pinzas especiales.
Agencias