Funcionarios de Estados Unidos se reunieron esta semana con agentes de la fiscalía general de México para discutir la reciente fuga de una prisión del capo narco Joaquín «El Chapo» Guzmán y coordinar esfuerzos para recapturarlo, dijo el miércoles un funcionario mexicano.
Representantes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos(DEA) conversaron con representantes del Gobierno mexicano en Ciudad de México el lunes para compartir información, dijo la fuente bajo condición de anonimato.
México ha buscado durante largo tiempo mantener su independencia de Estados Unidos en asuntos de seguridad nacional, pero ha recibido fuertes críticas por no haber extraditado a Guzmán a Estados Unidos.
Fiscales estadounidenses habían dicho que buscarían extraditar al capo y reportes de medios estadounidenses a inicios del año citaron fuentes no identificadas sugiriendo que Washington había presentado una solicitud formal.
Pero no se hizo pública ninguna solicitud formal de extradición y la oficina del fiscal general de México dijo que no tenía planes de enviarlo a Estados Unidos porque purgaría una larga condena en el país.
El escape de Guzmán la noche del sábado de una prisión de máxima seguridad a través de un túnel que desembocaba justo en su celda fue un duro golpe para el presidente Enrique Peña Nieto.
Encargados de la seguridad de México se sorprendieron por la fuga y el Gobierno ha dicho que sólo pudo haber ocurrido con la complicidad de funcionarios y personal de la prisión.
El Gobierno cesó al director del penal, de donde nadie había escapado.
Guzmán, el criminal de más alto perfil de México, era líder del poderoso cártel de Sinaloa antes de su captura en 2014. El cártel ha traficado drogas por miles de millones de dólares hacia Estados Unidos y se le atribuyen miles de muertes.
MÉXICO DF (Reuters)
