EL CAIRO, Egipto (AP) La policía antimotines se enfrentó el viernes con simpatizantes del ex presidente islamista de Egipto en diversas partes del país, lo que dejó seis muertos, al tiempo que la Hermandad Musulmana renovó su llamado para protestar antes de un importante referendo a efectuarse este mes.
Los enfrentamientos se extendieron a zonas residenciales densamente pobladas en varias ciudades y provincias, incluidas El Cairo, Giza, Ismailia y Alejandría, mientras que cientos de integrantes de la Hermandad y sus simpatizantes apedreaban a las fuerzas de seguridad, que respondieron con chorros de agua y gas lacrimógeno.
Había humo negro en el aire después de que los manifestantes quemaran neumáticos y lanzaran bombas molotov y fuegos artificiales contra los elementos de seguridad. Varios vehículos de la policía fueron incendiados y los manifestantes bloquearon las calles principales.
El Ministerio de Salud indicó que seis personas, incluidas tres en El Cairo, perdieron la vida y más de 40 resultaron heridas en las manifestaciones. Una alianza encabezada por la Hermandad dijo en su página de Facebook que la cifra de muertes había ascendido a 19.
El Ministerio del Interior informó en un comunicado que 122 manifestantes de la Hermandad fueron arrestados mientras portaban granadas de fabricación casera y bombas molotov.
Este tipo de incidentes ha sido recurrente desde que el ejército derrocó al presidente Mohamed Morsi en un golpe de Estado el 3 de julio después de que millones de manifestantes anti islamistas protestaran para pedir su renuncia.
Las cifras de aquellos que salen a las calles en apoyo a la Hermandad el grupo político más organizado de Egipto se han reducido bastante en los últimos meses luego de que el gobierno interino apoyado por el ejército comenzara redadas contra ellos. Cientos murieron cuando las autoridades desbarataron campamentos de manifestantes, y cientos más han sido arrestados y enviados a juicio.
El gobierno también ha tratado de reducir los recursos del grupo y la semana pasada ordenó la confiscación de bienes de cientos de grupos no gubernamentales bajo sospecha de estar relacionados con la Hermandad. A cientos de líderes del grupo y empresarios les han sido incautados sus bienes.
En los últimos meses el grupo ha cambiado de tácticas, apoyándose más en mujeres y estudiantes para encabezar las manifestaciones antes de dos importantes fechas: la segunda sesión del juicio de Morsi el 8 de enero, acusado de matar a manifestantes, y el próximo referendo sobre una constitución creada por una asamblea de tendencia secular, el 14 y el 15 de enero.