El piloto Michael Schumacher ha presentado una leve mejoría a como aseguran los médicos que están a cargo de su recuperación, y crece la angustia de los miles de alemanes que están al pendiente de su salud.
La familia de Michael ha pedido respeto en cuanto su privacidad, sobre todo luego del incidente en donde se interceptó a un periodista disfrazado de cura que pretendía entrar al hospital de Grenoble en donde está ingresado el siete veces campeón de Formula Uno.
En cuanto a los detalles del accidente, se han sabido nuevos datos y es que el accidente de Schumacher se produjo después de que éste abandonara la pista marcada para ayudar a un amigo que había sufrido una caída.
De esta forma los agentes de Michael negaron categóricamente que estuviera esquiando a gran velocidad, como se ha afirmado en los medios, aunque pese a ello se dio un golpe muy fuerte.
«La situación está mejor controlada que ayer», declaró el doctor Jean-François Payen en conferencia de prensa.
Tras someterle a un nuevo escáner, los médicos propusieron a la familia una nueva intervención, que duró unas dos horas, en la que se pudo evacuar «sin riesgos» un hematoma, situado en el área izquierda del cerebro, y se le instaló un dispositivo para hacer disminuir la presión intracraneal, explicaron.
«Las próximas horas son cruciales», agregaron los médicos que atienden a Schumacher, que permanece en coma inducido y estado «crítico» y «frágil».
Los doctores indicaron que volverán a comunicar sobre la salud de Schumacher sólo si se producen evoluciones en su estado.