La Policía de Río de Janeiro tomó hoy el control del Complejo de Favelas de Maré, uno de los antiguos reductos del narcotráfico en la segunda mayor ciudad de Brasil y que fue «pacificada» por el Ejército hace poco más de un año, justo antes del Mundial de fútbol.
Este martes se hizo el simbólico traspaso de poderes, según el cual el Ejército abandona el control del conjunto de favelas, en la zona norte de la ciudad, y lo cede a la Policía Militarizada, tal como ya sucedió en otras favelas que fueron pacificadas en Río de Janeiro.
Según informó la Policía, desde que el Ejército tomó el control de las 15 favelas que forman Maré. Se realizaron más de 83.000 acciones policiales y se llevaron a cabo 674 detenciones.
Ahora, 1.620 miembros del cuerpo de la Policía Militarizada serán los encargados de garantizar la seguridad para las 140.000 personas que viven en el Compleo de Maré, donde el Gobierno regional de Río de Janeiro pretende instalar próximamente cuatro Unidades de Policía Pacificadora (UPP).
Ante la preocupante situación de violencia generada por diversos grupos criminales, la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, autorizó que un batallón de élite de la policía, junto a 1.200 soldados, ocuparan el 30 de marzo de 2014 el complejo de Maré, en un punto estratégico de Río de Janeiro, muy cercano al aeropuerto.
Antes de la ocupación, la tasa anual de homicidios en la zona era de 21,29 muertes por cada 100.000 habitantes, mientras que en la actualidad esa cifra ha caído hasta las 5,33 en el mismo comparativo, según datos del Instituto de Seguridad Pública (ISP) del estado de Río de Janeiro.
RIO DE JANEIRO, (Xinhua)