Otro ataque armado en contra de unidades de transporte interurbano se registró ayer en Comayagüela, el tercero en menos de dos meses contra la misma empresa, sin que se hayan reportado daños humanos que lamentar, solo pérdidas materiales.
La mañana de ayer, hombres armados dispararon contra el autobús de la empresa Costeños color azul, con matrícula AAS-0199 en la séptima avenida de Comayagüela, en las inmediaciones del mercado Mama Chepa, sin dejar muertos ni heridos.
Los administradores manejaron el caso con hermetismo y prefirieron no proporcionar información sobre lo acontecido, por lo que la Policía realiza las investigaciones del caso.
La información que conoció EL HERALDO a través de una fuente policial es que los maleantes interceptaron la unidad de transporte en el momento que se disponía a viajar a San Pedro Sula con varios pasajeros a bordo y le dispararon de frente dañándole parte del motor. A raíz de esa situación, los encargados de la empresa determinaron cancelar el viaje y trasladar el autobús a la terminal ubicada en el barrio Villa Adela.
El portavoz de la Secretaría de Seguridad, subcomisionado Leonel Sauceda, informó en relación al atentado criminal es que a lo único que le dispararon fue al autobús, pero sin haber heridos, por lo que un equipo de inteligencia realiza las investigaciones.
Ataques a la empresa
Con este son tres los ataques que se registran en contra de la misma empresa de transporte interurbano, que cubre la ruta de Tegucigalpa a San Pedro Sula y la zona sur del país.
El jueves 16 de abril en el mismo lugar donde sucedió el ataque de ayer, un presunto delincuente que se conducía en una motocicleta disparó contra un autobús de Los Costeños que también estaba a punto de emprender el viaje.
Mientras tanto, el 29 del mismo mes cuatro presuntos pandilleros le prendieron fuego a la unidad de transporte de la misma empresa con placas AAS-2670 en la estación de Villa Adela. Según la información que obtuvo la Policía en aquella ocasión, los inadaptados sociales llegaron al lugar a bordo de un automóvil con los rostros cubiertos con gorros pasamontañas, rociaron el automotor número de registro 6 con gasolina y luego lo incendiaron.
Los delincuentes huyeron con rumbo desconocido, mientras que técnicos de la Sección de Inspecciones Oculares de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) realizaron la requisa en busca de indicios que pudieran ayudar a identificar a los responsables.
Hasta la fecha, la Policía no ha reportado capturas de sospechosos, por lo que los casos siguen en la impunidad. Las autoridades atribuyeron estos hechos a la desesperación de las bandas de extorsionadores en vista de que la Policía les está cerrando los espacios y que por esa razón buscan la manera de intimidar a los propietarios de buses.
Los ataques armados se han extendido a otras empresas de transporte interurbano y urbano de Tegucigalpa y San Pedro Sula, donde se reportan varios hechos de violencia.
El Heraldo