La agencia de control de las armas químicas anunció ayer que 90% de los arsenales mundiales de ese tipo de armamento ha sido destruido, lo que calificó de gran hito.
Entre los arsenales eliminados está el denominado gas mostaza y los precursores químicos para elaborar gases mortíferos como sarín, informó la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ).
Este es un gran hito que demuestra que estamos en vías de dejar al mundo libre de armas químicas, ?informó el director de la OPAQ, Ahmet Uzumcu, en un comunicado.
En total se han destruído unas 65 mil toneladas métricas de armas químicas declaradas, principalmente de los arsenales estadunidense y ruso, informó el vocero provisional de la organización, Peter Sawczak.
La OPAQ saltó al primer plano hace un tiempo, por su papel en la destrucción de los arsenales químicos sirios.
Eso incluye unas mil 300 toneladas de armas químicas que fueron sacadas de Siria y la mayoría de las cuales fueron destruídas a bordo de un navío estadunidense.
La completa destrucción de los arsenales ruso y estadunidense, que datan de la Guerra Fría, está prevista para 2020 y 2023 respectivamente, indicó la OPAQ.
Todas las actividades de destrucción se han completado de manera segura, ?añade el comunicado de la organización con sede en La Haya.
El director general de la OPAQ subrayó que queda todavía trabajo por delante y nuevos retos que afrontar si la comunidad internacional quiere prevenir la reaparición de este tipo de armas.
Mantener la vigilancia sobre ciertas actividades de la industria química para aminorar el riesgo de que sustancias químicas comerciales se empleen con fines de armas químicas es una de las tareas principales de la OPAQ.
Desde que se instauró la Convención de Armas Químicas en 1997, que estableció la destrucción de los arsenales estadunidense y ruso, 190 naciones se han adherido al texto.
Los parlamentos de Angola y Birmania aprobaron recientemente sumarse a la Convención y esperan convertirse pronto en Estados parte.
Agencias