Una chiva de cigarro encendida posiblemente fue la causa que originó que se quemara la tijera donde dormía, el anciano Luis Alfonso Zepeda Martínez de 67 años quien murió «totalmente carbonizado» al ser alcanzado por el fuego.
Posiblemente, el hombre de la tercera edad no sintió el fuego. Él dormía profundamente debido a la cantidad de alcohol que había consumido.
«Él era un hombre solo, vivía abandonado en esa humilde casa», refiere Pastora Membreño, vecina de la víctima, «hace unos días le pagaron su pensión reducida y comenzó a beber, el susto fue cuando vimos salir humo y fuego del fondo de la casa lamentablemente no pudimos hacer nada para salvarlo», dijo.
«Sentíamos, un tufo…un tufo feo», declara Doña Anastasia Salgado, «no sé cómo los chavalos del barrio miraron las llamas y corrieron a la casa, era él pero ya estaba quemado y muerto, en la vieja tijera de saco de nailon».
Al lugar se trasladó la guardia operativa de la policía de Chinandega. El Sub comisionado Francisco Ruiz, Jefe de la delegación policial de Chichigalpa dijo, que a eso de las 12:30 del mediodía del miércoles recibieron una llamada telefónica que en el sector norte del templo católico, El Pueblito, una persona estaba fallecida a consecuencia de quemaduras, por lo que se procedió a enviar el equipo técnico y la guardia operativa, y efectivamente estaba la tragedia. Aún se está investigando, han precisado las mismas fuentes.
Por su parte la médico forense Silvia Villegas, refirió que el anciano sufrió quemaduras en el 90 por ciento del cuerpo, en el lugar se encontraron la ropa y la sábana quemada en su totalidad.
Las investigaciones del caso arrojaron señales que el señor tenía varios días de estar ingiriendo alcohol, ya ebrio se acostó en la tijera, se arropó, fumó y termino quedándose dormido. En el lugar de los hechos la policía encontró los palillos de fósforos y chivas de cigarro a la orilla de la tijera, por lo que descartó que hubiera mano criminal en el caso.