La ceremonia de homenaje a Nelson Mandela que se celebró ayer y reunió a los principales líderes políticos del mundo dejó indignados a los sordomudos de Sudáfrica, que denunciaron al intérprete de los discursos como un impostor e ignorante del lenguaje de signos.
«Gesticulaba y movía sus manos en todos los sentidos. No tenía ninguna gramática, no utilizaba ninguna estructura, no conocía ninguna regla de la lengua», dijo Delphin Hlungwane, intérprete oficial de la Federación de Sordos de Sudáfrica.