A pocas horas de terminar su jornada laboral el ciudadano Jaime Rivas nunca se imaginó que en vez de ir a reunirse con su familia iría a parar a un centro hospitalario, luego que cayera sobre su humanidad una grúa colgante al momento que trasladaban hierro de un lugar a otro en su centro de trabajo.
Rivas recibió golpes en diferentes partes de su cuerpo y escapó de una muerte segura, según sus compañeros de trabajo.
El supervisor de Rivas da gracias a Dios que el accidente no pasó a más, ya que el lesionado portaba medios de protección que la empresa requiere para este tipo de trabajo.
Una ambulancia de Cruz Roja Nicaragüense llegó al lugar del accidente para atender al lesionado y luego realizar su traslado a un centro hospitalario. El hecho ocurrió de los semáforos de Rubenia dos cuadras al norte.
