El Gobierno de Australia ha decidido llamar a consultas a su embajador en Indonesia después de que las autoridades de ese país ejecutaran a dos ciudadanos australianos por su implicación en el narcotráfico. Según informa un periódico australiano, el primer ministro Tony Abbot «no quería tomar esa decisión», pero no encontró otra respuesta posible.
«Australia respeta la soberanía de Indonesia, pero lamenta que se haya aplicado la pena capital», agregó Abbot.