El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, destituyó este jueves al ministro de la Presidencia Melvin Jiménez, que era objeto de acusaciones de distintos sectores por lo que consideraban una deficiente coordinación política.
Solís reconoció que Jiménez ha sufrido un «desgaste» los últimos meses que hacían insostenible su presencia en el cargo, en el que estaba desde hacía casi un año, como principal operador político del gobierno.
«Melvin Jiménez ha sufrido un enorme desgaste en estos últimos meses, han sido muchas presiones y él las ha soportado con estoicismo», dijo Solís a periodistas, en ocasión de la inauguración de un colegio técnico profesional en las afueras de la capital.
Solís, quien asumió el poder el 8 de mayo del año pasado, adelantó que el sustituto será anunciado este viernes.
La salida se produjo en medio de una polémica por la divulgación de un proyecto de ley de prensa que establecía sanciones a medios por divulgar «mentiras» o informaciones «contrarias a las buenas costumbres».
«Melvin Jiménez desde la campaña ha liderado un grupo de confabulación de poca monta, de negociación de puestos en las esferas del poder. El presidente da un gran paso con su salida, la esperanza es que algunos errores que se han cometido sean subsanados», declaró el diputado Ottón Solís, del gobernante Partido Acción Ciudadana.
En el mismo tono, el diputado Gerardo Vargas, del izquierdista Frente Amplio, consideró que la permanencia de Jiménez en el cargo era «insostenible» y su salida permitirá al presidente iniciar el segundo año de su mandato con más fuerza.
San José, Costa Rica | AFP