El hedor nauseabundo que provenía del interior del bar El Almendro, ubicado en Rubenia, exactamente de El Cevichito 1 cuadra abajo, puso intranquilos a los vecinos y mucho más a los moradores de la casa de la señora Carolina Barrios, ya que pensaban que se trataba de la descomposición del cuerpo de algún prójimo.
De hecho algunos pensaban que en efecto pudo haber sido un cuerpo, ya que en años anteriores este mismo negocio se vio involucrado en una tragedia mortal.
Tras llegar la arrendataria se verificó que por un tonto descuido unas 10 libras de carne de cerdo se habian podrido, despertando mucho enfado en los afectados y la misma Policía Nacional, quienes creen que el Minsa debería poner cartas en el asunto, pues el ambiente insalubre que generó atentaba contra la salud pública.
Loyda Padilla