Ejecutivos de Lufthansa visitan zona de siniestro en Alpes

El director ejecutivo de Lufthansa dijo el miércoles que llevará «un largo, largo tiempo» entender qué llevó al letal siniestro de la semana pasada en los Alpes — pero rechazó decir si la aerolínea conocía el estado de salud mental del copiloto sospechoso de destruir el avión intencionadamente.

El consejero delegado de Lufthansa, Carsten Spohr, y el de su aerolínea de bajo coste Germanwings, Thomas Winkelmann, visitaron el miércoles la zona del choque en medio de crecientes dudas sobre la condición psicológica del copiloto Andreas Lubitz y por qué no revelaron más información al respecto.

Los dos hombres depositaron flores y permanecieron en silencio frente al monolito de piedra que recuerda a las 150 víctimas del siniestro. El monumento mira a las montañas donde el pasado 24 de marzo chocó el A320 de Germanwings deshaciéndose en mil pedazos y tiene un mensaje de recuerdo en alemán, español, francés e inglés.

La fiscalía alemana dice que el historial médico de Lubitz previo a la obtención de su licencia de piloto hablaba de «tendencias suicidas», pero sus visitas médicas desde entonces no mostraron síntomas de tendencias suicidas o de agredir a otros.

Nuevas imágenes de la operación de recogida muestran a investigadores trasladando grandes piezas deformadas del avión: neumáticos, partes del fuselaje con varias ventanas retorcidas, y lo que parece ser un trozo de la cola anaranjada de la nave.

SEYNE-LES-ALPES, Francia (AP)