En un hotel de Paris, terminó una historia de amor terrenal que trascendió a otro mundo. Una pareja de ancianos de 86 años han sido encontrados muertos tomados de la mano, junto a una carta en la que reivindicaban su derecho a una «muerte dulce».
Un empleado del hotel encontró a los ancianos tendidos sobre la cama y con bolsas de plástico en la cabeza el pasado viernes, al subirles el desayuno. «Tenían más miedo a separarse y a la dependencia que a la muerte», explicó a «Le Parisien» el mayor de sus hijos, quien reveló que la pareja había tomado esa decisión «hace decenas de años».
El lugar donde aparecieron fue precisamente donde se conocieron Bernard, economista, filósofo y alto funcionario, y Georgette Cazes, profesora de latín y literatura.