Madre recupera a su hijo de la embajada de Alemania

“Yo no salgo sin Arun, Arun es nicaragüense y tiene que retornar a su hogar”. Cumplió su palabra. Ximena Rodríguez salió con su hijo. La mediación se logró, tras varias horas de negociación entre padres, gobierno y autoridades de la embajada de Alemania.

“Quiero subrayar el gran entendimiento que tuvimos la Ministra, el obispo y yo, agradezco a todos los que participaron en encontrar esta solución”, dijo el embajador de Alemania en Nicaragua, Karl-Otto König.

“El niño regresa con su madre, hay un acuerdo, es como bien dijo el embajador es un caso humanitario, nunca hubo de por medio un caso político, por eso nos tardamos tanto porque llegamos al mejor acuerdo en función de Arun”, destacó Marcia Ramírez, Ministra de la Familia

“Esto es un acuerdo de los padres, y eso era lo bueno que ambos mostraron buena voluntad y esto facilito mucho (el acuerdo)”, sostuvo el Obispo Bernardo Hombach.

La madre había denunciado a su ex pareja de nacionalidad Alemana sobre el rapto de su hijo de 4 años. El caso fue acompañado oportunamente por el Gobierno y el acuerdo garantiza que el niño permanezca en el país.

”Se ha cumplido la justicia de Nicaragua, me parece formidable el apoyo del Gobierno hacia Ximena”, enfatizó la tía de Arun, Xaviera Gutiérrez

“Nosotros reconocemos que se aplicó la ley, que el Ministerio de la Familia actuó de manera ágil, apoyando también el derecho de Arun”, mencionó Xóchilt Gutiérrez, familiar de Arun

Este caso fue humanitario y no político. Las buenas relaciones entre Nicaragua y Alemania contribuyeron en este acuerdo familiar.

“Y que en realidad, aunque este es un tema, entre dos partes y su hijo, esto es algo que trasciende en una sociedad, y emite mensajes sobre las relaciones entre los gobiernos, y sobre nos podemos articular como ciudadanos, para asegurarnos que los derechos de una madre y de un niño no sean violentados”, aseguró la amiga de Ximena, Yolanda Talavera.

De esta manera, se cumplió con legislación nacional y extranjera sobre los derechos de este niño que regresó al regazo de su mama.

Elizabeth Mendoza