Las muertes por eutanasia en el norte de Bélgica más que se doblaron en los últimos seis años, hasta alcanzar el 4,6% de las muertes.
Desde la legalización de la eutanasia en 2002, según las universidades de Ghent y Bruselas, ha aumentado de forma sustancial la aceptación del acto deliberado de poner fin a la vida de un paciente por petición expresa del enfermo. El sondeo anterior, de 2007, mostró que sólo el 1,9% de las muertes totales en la zona se debían a la eutanasia.
La práctica sólo es legal en Holanda, Bélgica y Luxemburgo, y las cifras del norte de Bélgica superan ahora el total de Holanda en 2010 del 2,8 por ciento.
Los que solicitan la eutanasia son principalmente personas con alto nivel de educación entre los 65 y los 79 años, señaló el estudio. Los enfermos de cáncer son el grupo más grande.
El estudio se limitó a las zonas de Bélgica de mayoría de habla flamenca.
BRUSELAS (AP)
