El sci-fi es un género que como cualquier otro en el mundo del cine tiene sus reglas. Toda historia de ficción lo tiene, por más superficial o profunda lo sea. Eso es algo que parece escapa de la trama en Reminescence, una de los peores películas que he visto este año.
Con la dirección y guión de Lisa Joy, misma co-creadora de Westworld (la serie de HBO), prometía contar algo llamativo y hasta inspirador. Desgraciadamente, el resultado es un mal intento de ser una ficción madura con estilo noir, en que el núcleo de la trama es carente de mayor significado.
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Se puede resumir en una historia detectivesca y de un hombre que hace todo por proteger a esa mujer que le quitó el aliento… El punto es, ¿por qué si eso era todo lo que querían contar, se necesitaba trasladar a un tiempo futurista?
Lo malo de Reminescence
Ni con el protagonismo de un actor muy cumplidor como Hugh Jackman se rescata un filme que peca con aires de grandeza.
Desde la narración en off del propio Jackman y esa vibra tipo años 30 o 40, que hace guiños adrede al cine noir, vemos que la estilización se pensó mucho más que la calidad argumental.
Nos sitúan en una Miami inundada por consecuencia del cambio climático, y en que los pudientes se han asentado en zonas que han construido diques para no sufrir del fenómeno. Ahí vive Nick Bannister, investigador privado que posee una máquina que permite acceder a la memoria de quien la usa.
De forma casual conoce un día a Mae, una femme fatale unidimensional y con actuación simple a más no poder. Ella llega para recuperar unas llaves que no recuerda dónde las dejó. Sí, de esa forma tan «creativa» es el disparador del contenido de esta cinta.
Y bueno, en ese encuentro se forja el amor de esos dos… sin mayor construcción de personajes ni nada por el estilo.
Tras un tiempo, están juntos y de la nada ella desaparece, iniciando así una serie de investigaciones que lo llevarán a un lado oscuro de la sociedad.
Desconexión con absolutamente todo
Ni la mejor amiga de Nick, interpretada por Thandie Newton, quien duele verla tan desperdiciada en este filme; salva una historia que va de mal en peor entre más avanza.
Jamás se vuelve creíble la relación entre Nick y Mae, no es un romance que uno quiera ver que triunfe, porque simplemente está desconectado y vacío.
Lo mismo sucede con esta ciudad inundada y las diferencias sociales. Existe solo «porque se ve cool», y ni decir del aspecto «futurista». En realidad todo lo que vemos del futuro es esa máquina y nada más.
Veredicto
Reminescence es una película que quiso contar una trama muy sencilla y está saturada de adornos superfluos. Cualquier intento de ser profunda (y abusan del lenguaje grandilocuente para buscarlo) es malogrado.
Por esto mismo digo sin temor a equivocarme, que es de las peores películas sci-fi (que se toman en serio) que he visto en toda mi vida.