La historia de Cenicienta ha sido fuente de inspiración para diversas películas, series y novelas. La mayoría de las producciones lleva siempre en el fondo de sus guiones un pedacito de este clásico infantil; basado en una historia que se transmitió de manera oral, de generación en generación, por toda Europa.
Escritores como el italiano Giambattista Basile, los alemanes hermanos Grimm y el francés Charles Perrault hicieron sus propias versiones del cuento de hadas; siendo este último el autor de la versión más conocida del clásico infantil gracias a Disney, responsable de llevar por primera vez el clásico a las pantallas en 1950.
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En el cuento, Cenicienta es la única hija de un acaudalado hombre que quedó viudo siendo muy joven y decide contraer matrimonio por segunda vez con una mujer frívola y malvada, que tiene dos hijas que son iguales o peores que ella.
Al fallecer el papá de Cenicienta, la madrastra la obliga a vestirse con harapos y a hacer todas las tareas de la casa, mientras que ella y sus hijas disfrutan de la vida.
La vida de la dulce joven da un giro de 360° cuando el rey organiza un baile en su castillo para que su hijo y heredero del trono escoja a su futura esposa.
Al evento fueron invitadas todas las doncellas y Cenicienta se hace muchas ilusiones de poder asistir; sin embargo, la madrastra, al ver que la joven se ha convertido en hermosa mujer; siente temor de que robe más miradas que sus hijas, y decide encerrarla para que no asista a la fiesta.
El resto de la historia ya la conocemos; llega el hada madrina a salvar a la joven; Cenicienta pierde su zapato de cristal, el príncipe la busca por todos lados, la encuentra y viven felices para siempre.
Evolución del personaje
El pasar de los años y el empoderamiento de la mujer han promovido varios cambios en los guiones basados en el cuento clásico.
En los años cincuenta, la solución que se planteaba para arreglar la vida de Cenicienta era un matrimonio con el príncipe.
Lo mismo sucedía con sus hermanas y el resto de las jóvenes del pueblo, que buscaban migrar de estatus social mediante una boda. Sin embargo, a estas alturas, esa premisa ha quedado completamente desfasada.
Cenicienta afrodescendiente
El primer paso hacia el cambio lo dio Disney en 1997, al presentar a la primera Cenicienta afrodescendiente de la historia, interpretada por la cantante Brandy.
La cinta fue producida por Whitney Houston; que además dio vida a el hada madrina, y también cuenta con la participación de la fabulosa Whoopi Goldberg.
Un año después, Drew Barrymore dio vida a la primera Cenicienta feminista.
En “Por siempre Cenicienta, una historia de amor”; Barrymore interpreta a Danielle una joven, que pese a pasarla muy mal con su madrastra y sus hermanastras, no pierde la picardía y es segura de sí misma, valiente y culta.
En una de las escenas más icónicas de la cinta, Danielle rescata al príncipe Henry de las manos de un grupo de gitanos.
Ya en los 2000, llegaron nuevas versiones del clásico, ambientadas en el siglo XXI.
En “La nueva Cenicienta 1” (2004), Hilary Duff interpreta a una Cenicienta moderna; que perdió a su padre durante un terremoto y que sueña con ingresar a la Universidad de Princeton.
Además de eso, conoce a su “príncipe azul” a través de un chat de postulantes a dicho centro de estudios, y se enamoran sin haberse visto jamás; es decir, ya no es la belleza de Cenicienta la que cautiva al muchacho sino su manera de pensar y las cosas que ella tiene por decir.
Con “La nueva Cenicienta 2” (2008) Selena Gomez le toma la posta a Hillary Duff, La historia varía un poco; la Cenicienta ahora anhela convertirse en una bailarina profesional y quien funge como el hada madrina es su mejor amiga.
En esta cinta, en lugar de la zapatilla de cristal, Cenicienta pierde un MP3 durante la fiesta de su instituto; en la que bailó con el príncipe, o mejor dicho el chico que le gusta.
Una Cenicienta latina y feminista
La historia de Cenicienta llega al mundo del streaming de la mano de Amazon Prime Video y tiene como protagonista a la actriz de orígenes cubanos y mexicanos Camila Cabello; que se ha convertido en la primera latina en interpretar a este personaje tan icónico.
Cabello, de 24 años, se meterá en la piel de Ella, una joven que quiere convertirse en una reconocida diseñadora de modas y para ello se traza metas; la primera de ellas es asistir al baile para mostrar el vestido que diseñó ante la sociedad y así dar a conocer su trabajo.
El príncipe queda en un segundo plano. En el tráiler ella le deja claro que quiere crecer en su vida profesional y que no quiere ser solo un adorno y saludar desde un palco; porque eso la haría lo mismo que estar encerrada en el sótano de su madrastra.
