La televisión en su mejor época es la que estamos viviendo desde los últimos 10 años, o quizás un poco más. Sobre todo por la libertad creativa que ahora es tan celebrada, y que más productoras se animan a apoyar. Eso sucede con Atlanta, un show que pasó por un receso de cuatro años y regresó con toda la fuerza.
Hace unas semanas en Netflix Latinoamérica estrenaron la Temporada 3 de esta serie producida por Donald Glover. Yo le había perdido un poco el hilo por lo mismo de tanto tiempo sin saber de la misma, pero cuando miré que había nuevos episodios me dispuse a ver con ganas. Nunca imaginé que en este conjunto de capítulos habría un verdadero tesoro para la experimentación en tv.
Glover y compañía hacen un trabajo impresionante para transformar a Atlanta. Ya no es las aventuras de Earn y Paper Boi, o mejor dicho, eso ya es un elemento que forma parte de un todo mucho más relevante. Aquí se juega con el surrealismo, con el terror, agregando dosis de un humor incómodo, negrísimo y ácido, sobre todo contra los blancos de Estados Unidos.
El punch de Atlanta es el saber equilibrar la crítica o la mofa ante los racistas, como explayar el racismo en sí; ese inherente (por más que lo nieguen) en la cultura gringa.
Episodios «bizarros» pero buenísimos de Atlanta
Por dar un ejemplo, el primer capítulo y los primeros 5 minutos de esta temporada parecen extraídos de una obra de Jordan Peele. Es algo que escapa una explicación lógica, un río que tiene cientos de cuerpos de esclavos, mientras un hombre blanco cuenta la historia en un bote a medianoche junto a su amigo.
Eso va a desatar esa vibra pesadillesca que también identifica el estilo de Atlanta para su Temporada 3. Vamos a conocer de niños que por «castigo» son adoptados por mujeres blancas; que los tratan casi-‘casi como esclavos. Mucha energía pasiva-agresiva en esas mujeres progre.
Por otro lado, tendremos un episodio en blanco y negro con un protagonista que es «mixto», o interracial. Son de esos negros que realmente parecen blancos, con todo el peso social que eso significa y que aquí retratan con un hermoso humor que a muchos les parecerá ofensivo.
Y es que todas esas historias estrambóticas, divertidas y algo tenebrosas son con gente nueva. Como si tal se tratase de Black Mirror o La Dimensión Desconocida; Atlanta se convierte en otra serie, de otra época, de otro tinte.
Libertad creativa para un producto único
Finalmente, me queda decir que la Temporada 3 de Atlanta es recomendable para incluso aquellos que no han visto las primeras dos. Solo deben tener de base que los protagonistas andan de gira por Europa, ya que el rapero Paper Boi ahora es toda una estrella.
Eso va a permitir al menos cuatro episodios en que veremos al elenco pasar también por situaciones extrañísimas, como un viaje por la cultura de la cancelación en Ámsterdam.
Sin duda, cada episodio es una pieza de estudio, y del cual sugiero que mejor no lo vean en maratón; sino poco a poco.