El episodio más polémico de la temporada 8 de Juego de tronos también tiene la escena más controvertida. El director David Nutter, en una reciente entrevista con The Huffington Post, ha intentado justificar la terrible despedida de Fantasma por parte de Jon y ha explicado la razón por la que no incluyeron ni una caricia al huargo. Y lo cierto es que no nos valen sus palabras.
Como ya nos imaginábamos, las razones de esta desalmada escena son económicas. "Como los huargos son creaciones CGI, decidimos hacerlo lo más sencillo que nos fuese posible. Y creo que es mucho más poderoso de este modo", explica Nutter.
Modificar al huargo por CGI mientras el personaje de Kit Harington le abraza o le hace alguna caricia debía aumentar mucho el coste de producción, por lo que no lo incluyeron.
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Mantener a Fantasma a un lado, creo que funcionaba mejor… Él [Jon] se marcha solo, se dirige a Fantasma y tienen este momento que pensé que era muy, muy poderoso.
Lo que nunca debió imaginar Nutter es esta avalancha de críticas que ha recibido por no incluir un pequeño momento cariñoso entre el héroe y su mascota. Jon se despide de muchos personajes, pero el más comentado, con diferencia, es el adiós a Fantasma.
Los fans lo han visto como un detalle prácticamente imperdonable y pocos coinciden con el director al definirlo como "poderoso".