Así lo aseguró The Hollywood Reporter, esta semana, y detalló que las autoridades desestimaron las demandas contra el actor que interpusieron Mark Burton y Brigid Sweetman, esposo y madre de Cathriona White, que murió por una sobredosis en 2015.
Tanto Burton como Sweetman, alegaban en sus demandas que Jim Carrey era el culpable de la muerte de Cathriona, pues afirmaban que el actor adquirió sustancias bajo un nombre falso y se las dio a ella, pese a saber que era propensa a la depresión y que previamente había intentado quitarse la vida.
En la denuncia, la madre de la ex del actor no solo lo señala de ser el causante de que Cathriona se hubiera metido en las drogas, sino de contagiarla de enfermedades de transmisión sexual, como herpes (por un escrito que habrían encontrado en el iPad de la fallecida), y que, la denunciante dice, le generó problemas mentales a su hija.
Ante esas acusaciones, Carrey presentó una contrademanda en septiembre, alegando que los pleitos eran un intento de explotar a un famoso. También afirmó que “White lo había extorsionado” y amenazado con contarle a los medios lo de las enfermedades de transmisión sexual, que el afirma es falso, reseñó The Hollywood Reporter.
Las autoridades siguieron estudiando el caso y finalmente, este mes, desestimaron juzgar a Carrey por el suicidio de su ex, por una acción de su abogado, informó ese medio el 31 de enero, aunque la decisión se habría tomado el 25 de enero.
“El abogado de Carrey, Raymond Boucher, presentó una moción solicitando al tribunal que obligara a Burton a proporcionar los resultados de las pruebas de ETS [Enfermedades de Transmisión Sexual] de [Cathriona] White. A través de esto, Boucher llegó a la conclusión de que un documento de 2011, que mostraba que White tenía resultados de prueba limpios antes de conocer a Carrey, era una falsificación […] Un representante de Carrey confirmó que los asuntos se desestimaron el 25 de enero, pero no hizo ningún comentario más allá de decir que el actor está deseoso de seguir adelante con su vida”, escribió el medio.
