El asteroide interestelar Oumuamua se podría haber originado de una nube molecular, según estudios de un equipo de astrónomos de la Universidad de Yale en un artículo aceptado para su publicación en la revista Astrophysical Journal y accesible en el repositorio arXiv.
Asteroide Oumuamua
Para determinar la edad del objeto, los científicos compararon su trayectoria con las órbitas de 50.899 estrellas del tipo F, vecinas al Sol. Con base en estos datos, estimaron que tiene alrededor de 35 000 000 de años.
En cuanto a la localización de las nubes moleculares más apropiadas, los autores del estudio señalan que es más probable que se originara en el grupo en movimiento de Carina o en la asociación estelar de Columba.
Aunque los cálculos son aproximados, permiten suponer el origen del objeto, opinan los investigadores. En particular, señalan que la edad del asteroide“ es comparable a la vida útil de una nube molecular”; un enorme conjunto de moléculas en estado gaseoso cuya masa puede superar la del Sol miles de veces.
Al respecto, indican que la gran densidad estimada del asteroide “se comprende mejor si el origen de Oumuamua puede atribuirse a un proceso de formación que es endémico de un núcleo de nube molecular y que no involucra discos protoestelares”.
¿Hidrógeno o nitrógeno?
Al indicar tal probabilidad, los astrónomos defienden la idea debatida de que el objeto consiste de hielo de hidrógeno. Como una alternativa, señalan que puede estar formado de hielo de nitrógeno «producido por impactos contra objetos cubiertos de nitrógeno y parecidos a Plutón en sistemas exoplanetarios».
«Esta hipótesis satisface las restricciones dinámicas y fotométricas, pero requiere una tasa muy alta de tales colisiones», explican los autores.
Como fuere, el origen del asteroide todavía es incierto. «Es muy probable que la resolución del misterio requiera la observación de otros objetos similares a Oumuamua», indican los científicos.