Según la información publicada en la cuenta de Instagram de CNN en español; la tumba contenía cinco esqueletos y cinco cráneos de granes cocodrilos que datan de antes del 304 a.C. Según el Instituto Belga de Ciencias Naturales de la universidad de Jaén, los cocodrilos podrían ser de dos diferentes especies.
Los arqueólogos creen que los restos fueron enterrados como parte de un ritual en honor a un antiguo dios egipcio; relacionado con estas especies. Otros creen que estaban allí en una represa y por algún derrumbe quedaron atrapados en Qubbat al-Hawa, considerado un yacimiento histórico en Egipto.
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Según algunos historiadores y arqueólogos consultados dicen que «los egipcios siempre han realizado embalsamamientos para gatos, babuinos; perros y al parecer, también cocodrilos. Esto por la representación que le daban a cada deidad en aquellos tiempo»
Una de las deidades que representaban con los cocodrilos era Sobek; quien estaba asociado con el Nilo, la fertilidad y la vida. «Se creía que con los sacrificios aseguraban una buena cosecha; se protegían de las inundaciones y que ellos eran los que protegían los tesoros de los faraones» mencionó uno de los arqueólogos.
Sobek se traduce del antiguo egipcio como ‘El cocodrilo’ según expertos llegó a ser una deidad del Reino Medio; y aquellas dos especies encontradas fueron claves en el Nilo y en el África Occidental.
Pero los ciudadanos de aquella época estos también representaban una fuente de alimento y algunas partes del animal como la grasa; la cual era utilizada como aceite para mejorar los dolores corporales, la rigidez incluso la calvicie.