Los pulpos son animales muy extraños, incluso hay científicos que afirman que son extraterrestres. Nos queda claro que desconocemos mucho de ellos, ¿pero sabías que son caníbales y que pueden regenerarse?
Estos animales cuentan con un amplio historial de canibalismo pues todas las especies son depredadoras y la mayoría recurre a la práctica de comerse a sus propios ejemplares, de acuerdo con un estudio publicado en Reviews in Fish Biology and Fisheries.
«El canibalismo en cefalópodos depende de la densidad debido a su agresividad depredadora. En el caso de los pulpos de naturaleza territorial, también depende de la disponibilidad local y temporal de alimentos y de la temporada de reproducción», explica el artículo.
Y eso nos lleva al increíble fenómeno que a veces ocurre entre los pulpos: las hembras llegan a comerse a su pareja o partes de ésta y por eso los machos han aprendido a huir de maneras muy curiosas.
El hectóclito en los pulpos viene siendo un brazo con la función del pene pues con éste puede efectuar la fertilización de los huevos de la hembra. Para que una hembra decida comerse al macho depende de su tamaño y de la disponibilidad de alimentos.
Pero si la hembra decide que tiene hambre después de la cópula, puede arrancarle el hectóclito. La buena noticia es que el macho puede escapar y sobrevivir pues puede regenerarlo. Incluso hay casos de machos que se arrancan su propio hectóclito para salvarse, según un artículo publicado en la revista académica Frontiers in Physiology.
Así que básicamente los pulpos pueden dejar su pene mientras huyen por su vida. Más vale "aquí corrió" que "aquí murió".
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Fuente: VIX