Alguien hizo un video de ti y lo publicó en Instagram, lo ves e inmediatamente sientes vergüenza. Te preguntas si de verdad suenas así y preferirías escuchar el ruido de uñas sobre una pizarra que oír tu propia voz de nuevo.
Si te sientes identificado, no te preocupes, no eres el único. De hecho, es tan común que tiene un nombre: voice confrontation, o «confrontación con la voz» en español. A todos nos genera incomodidad y hasta vergüenza escuchar nuestras propias voces, no es porque sean feas, es que es extraño escucharnos a nosotros mismos y la ciencia explicó por qué.
¿Qué es la confrontación con la voz?
Cuando escuchamos nuestras voces mientras hablamos, nuestros oídos reciben dos sonidos: el externo, producido por la conducción del aire, y el interno, es decir, cuando formamos las palabras desde la garganta. El sonido que se conduce a través de los huesos tiene frecuencias más bajas que no están incluidas en el sonido del aire.
En palabras más sencillas: cuando hablamos creemos que nuestra voz es más profunda y cuando por fin la escuchas en una grabación te das cuenta de que no es así, y es muy desconcertante.
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Según una entrevista del diario británico The Guardian con la psicóloga Silke Paulmann, "el hecho de que sonamos más alto de lo que pensamos que deberíamos nos lleva a avergonzarnos ya que no cumple con nuestras expectativas; nuestra voz juega un rol importante en la formación de nuestra identidad y creo que a nadie le gusta darse cuenta de que no eres quien creías que eras".
Sin embargo, la diferencia en el sonido no es lo único que nos resulta extraño. Según un estudio realizado en 1966, la "confrontación de la voz" también nos resulta extraña porque hay una diferencia entre las emociones que creemos que nuestra voz transmite y lo que realmente demuestra. Escuchar tu voz grabada puede revelar aspectos de tu personalidad que no creías que estabas dando a conocer, como el nivel de ansiedad, tristeza, etc.
Si bien escucharte puede ser raro y quizás no te guste el sonido de tu voz, no te sientas mal, seguramente los demás no piensan eso de tu voz de la misma forma que tú no juzgas las voces de los demás.
Fuente: VIX