Madrid, 22 feb (EFE).- El arte rupestre más antiguo del mundo tiene más de 66.000 años de antigüedad, fue hecho por neandertales y se ha datado en tres cuevas de diferentes zonas de España, según un estudio que se publica hoy en Science.cuer
Esto supone que las pinturas de las cuevas de Ardales (Málaga, sur), Maltravieso (Cáceres, oeste) y La Pasiega (Cantabria, norte) son entre 20.000 y 40.000 años más antiguas que representaciones ya conocidas, entre las que están las famosas de Altamira (Cantabria) o Lascaux (Francia).
Un estudio realizado por un equipo multidisciplinar de catorce expertos, del Instituto Max Planck (Alemania), el Centro Nacional para la Investigación Científica (Francia), las universidades británicas de Southampton y de Durham, además de la de Lisboa (Portugal) y las españolas de Alcalá, Barcelona, Isabel I (Burgos), y Cádiz.
Las nuevas dataciones de las cuevas de Ardales, Maltravieso y La Pasiega, que certifican una antigüedad hasta ahora insospechada para los orígenes de la actividad artística en el género humano, han sido posibles gracias al método de Uranio-Torio (U-Th), que mide el tiempo tomando como base la desintegración radiactiva del uranio de las costras de calcita asociadas a las pinturas.
En concreto, las conclusiones de la investigación determinan que una mano pintada en negativo en Maltravieso fue realizada al menos hace 66.700 años, y que una formación de calcita fue cubierta de pintura hace al menos 65.500 años en la gruta de Ardales. Además, revelan que un signo lineal con forma de escalera de la caverna de La Pasiega cuenta con cerca de 64.800 años.
Las muestras fueron procesadas por los investigadores Alistair Pike y Chris Standish, de la Universidad de Southampton, y Dirk Hoffmann, del Instituto Max Planck, quienes tomaron para sus mediciones unos pocos miligramos de depósitos de calcita existente bajo y sobre las pinturas, consistentes en distintos motivos en color rojo.
De forma simultánea, dos de los investigadores que participaron en ese estudio, publica junto a otros autores un segundo documento en Science Advances que ofrece una antigüedad de entre 115.000 y 120.000 años para el yacimiento de la cueva de los Aviones (Murcia).
Ahí se han encontrado conchas pintadas y perforadas que, en opinión de los especialistas, estarían vinculadas con decoraciones corporales empleadas por los neandertales (Homo neanderthalensis).
Un descubrimiento que, según mantiene en declaraciones a Efe el investigador de la Universidad de Barcelona Joao Zilhão confirma que "los neandertales utilizaban mezclas de pigmentos sofisticadas y practicaban la ornamentación del cuerpo, incluso mucho antes de que tales conductas se hayan podido documentar entre los primeros hombres modernos de África".
Ambos artículos constituyen una relevante aportación al actual debate científico sobre el reconocimiento de las primeras capacidades simbólicas y artísticas de la humanidad, que hasta hace poco la mayoría de los expertos solo reconocían a nuestra especie: el Homo sapiens.
Uno de los autores del artículo, el profesor de la Universidad Isabel I de Burgos Marcos García, explicó que las fechas obtenidas en esta investigación "son anteriores al menos en 20.000 años a la llegada de los primeros humanos modernos a Europa y certifican su autoría por parte de grupos humanos neandertales".
En los últimos años, varios descubrimientos ya venían proponiendo que algunos grupos humanos anteriores al Homo sapiens se decoraban el cuerpo con tonos ocres y abalorios y realizaban pequeños signos, principalmente líneas, sobre huesos y piedras.
Unas capacidades que, como comenta Marcos García, "tradicionalmente solo venían siendo atribuidas a las primeras poblaciones de humanos modernos surgidas en África hace 200.000 años y que llegaron a Europa hace unos 40.000".
Marcos García considera ahora que las dos nuevas investigaciones dadas a conocer hoy en Science implican "un replanteamiento de los modelos vigentes sobre el origen del pensamiento simbólico y la expansión de las primeras capacidades artísticas de los humanos".
No obstante, Joao Zilhão va aún más allá al mantener que "los neandertales en nada se diferenciaban, desde el punto de vista cognitivo y del pensamiento simbólico, de las primeras poblaciones africanas de hombres anatómicamente modernos".
Y que "estas características definidoras de nuestra especie aparecieron en las etapas iniciales de la evolución humana, hace más de medio millón de años".