El día en que un ser humano pueda levitar no parece estar tan lejano, a tenor de lo demostrado por el experimento de unos ingenieros de la Universidad de Bristol (Reino Unido), que utilizaron el tractor acústico más potente del mundo para levantar objetos de un tamaño como se había visto antes.
Los haces acústicos del tractor utilizan las ondas sonoras para retener partículas en el aire y hasta ahora se creía que los haces acústicos de los tractores se limitaban a levitar objetos pequeños. Incluso, se creía que resultaba imposible levitar objetos más grandes sin perder estabilidad.
Según el estudio, que ha sido publicado en la revista Physical Review Letters, la nueva técnica, consistente en crear una estructura similar a un tornado, es extremadamente ruidosa pero tiene un núcleo silencioso.
Los investigadores vieron que cuando cambiaban la dirección de los vórtices acústicos de rápida fluctuación que componen esta estructura, podían controlar la velocidad de rotación y estabilizar el rayo tractor.
Una vez estabilizada la viga, el equipo pudo aumentar el tamaño del núcleo silencioso en el centro de este "tornado sonoro", lo que le permitió sujetar objetos más grandes.
En la demostración detallada en el estudio, los ingenieros utilizaron ondas ultrasónicas en un tono de 40kHz para formar los vórtices acústicos. El núcleo silencioso de la estructura era capaz de sostener una esfera de dos centímetros de un polímero sintético.
En contexto
Por otro lado, descontaminar el aire podría traer consecuencias nefastas para la Tierra debido a que podría empeorar el calentamiento global y causar efectos climáticos extremos, advierte una investigación publicada en la revista Geophysical Research Letters y citada por Scientific American.
La contaminación atmosférica ayuda a enfriar el clima, evitando parte del calentamiento global. Ciertos aerosoles ?que son contaminantes emitidos a menudo por actividades industriales? como por ejemplo los sulfatos, protegen a la Tierra de parte de la radiación solar. De ese modo, señalan, eliminar las emisiones de aerosoles podría provocar un calentamiento global adicional de entre 0,5 y 1,1 grados. Esto es importante teniendo en cuenta que la Tierra ya se ha calentado en un grado.