Este 19 de enero, a las 08:24 (UTC) el asteroide 2018 BD fue descubierto por los científicos del programa de investigación Catalina Sky Survey, que tiene por misión la búsqueda de cometas, asteroides y objetos próximos a la Tierra.
Solo siete horas después, el cuerpo rocoso pasó casi 'rozando' el planeta, a una distancia de apenas 38.895 kilómetros, que casi coincide con la altura en la que los satélites artificiales orbitan la Tierra.
El asteroide era del tamaño de un automóvil (de entre 2,5 y 5,5 metros) y si bien hubiese ardido y se habría desintegrado en caso de entrar a la atmósfera, también es cierto que de haber chocado con cualquier satélite lo hubiese destruido. Si la colisión fuese con un satélite de comunicaciones, habría podido provocar consecuencias muy significativas.
El análisis del albedo, es decir, de cómo el asteroide refleja la luz del sol, ha permitido estimar un diámetro de 650 metros, explica Josep Maria Trigo, investigador del Institut de Ciències de l'Espai (IEEC-CSIC), de Barcelona. El espectro de la luz reflejada informa también sobre los materiales que lo componen. Sin embargo, de momento este análisis aún no está publicado en las webs de información oficiales. Poco más se puede saber con observaciones a gran distancia.
Los especialistas, que tienen por misión la búsqueda de cometas, asteroides y objetos próximos a la Tierra, detallaron que el cuerpo rocoso pasó a una distancia de apenas 38.895 kilómetros, casi similar a la altura en la que los satélites artificiales orbitan el plantea. Explicaron que el hecho de que el asteroide haya sido detectado estando cerca de la Tierra se debe a que los cuerpos celestiales de tan reducido tamaño escapan al alcance de los equipos actuales que detectan cuerpos más grandes.
Uno de los asteroides detectados es el AJ129 2002, que mide aproximadamente 1,1 kilómetro y que pasará cerca del planeta Tierra el próximo 4 de febrero, a una velocidad de 107.826 km/h.