Probablemente ha sido la erupción de enana blanca más luminosa jamás vista lo que han descubierto astrónomos de la Universidad de Leicester usando el observatorio satelital Swif.
El evento ha sido detectado en la dirección de una de nuestras galaxias más cercanas: La Pequeña Nube de Magallanes.
Estrellas binarias
En un estrecho sistema de estrellas binarias formado por una enana blanca y una estrella compañera parecida al Sol, el material es transferido de una compañera a la enana blanca, aumentando gradualmente hasta alcanzar una presión crítica.
Utilizando telescopios desde Sudáfrica a Australia hasta Sudamérica, así como el observatorio Swift en órbita, un equipo liderado por el Observatorio Astronómico de Sudáfrica ha revelado la llamada SMCN 2016-10a. Según explica Kim Page, miembro del equipo Swift de la Universidad de Leicester:
La capacidad de respuesta rápida de Swift, junto con su horario planificado diariamente, lo hace ideal para el seguimiento de eventos transitorios, incluidas las novas. Fue capaz de observar la nova a lo largo de su erupción, comenzando a recoger datos de rayos X que fueron esenciales para demostrar que la masa de la enana blanca se aproxima al máximo teórico; la acumulación continua puede causar que sea destruida totalmente en un momento explosión de supernova, así lo informa el portal web Xataka.
La Pequeña Nube de Magallanes, a 200.000 años luz de distancia, es una de nuestras galaxias más próximas.
En contexto
Un equipo internacional de científicos ha descubierto un anillo de 70 kilómetros de ancho alrededor de Haumea, el planeta enano llamado en honor de la diosa de fertilidad hawaiana. Haumea tiene forma elipsoide y es una de las rocas espaciales más grandes del cinturón de Kuiper, la región en forma de disco de cuerpos helados que se extiende desde la órbita de Neptuno.