Solo la atmósfera de nuestro planeta protege a la humanidad de los efectos que estos fenómenos podrían causar.
Un equipo de científicos de la Universidad de Sheffield y la Universidad de la Reina de Belfast (Reino Unido) han captado con gran detalle el momento en el que se produjo la mayor erupción solar en más de 12 años.
La llamarada se produjo el pasado 6 de septiembre y fue clasificada como de categoría X, el tipo de explosión solar de mayor potencia. Ese evento fue observado durante un período de 48 horas y pudo ser grabado usando el Telescopio Solar Sueco del Observatorio del Roque de los Muchachos, ubicado en la isla española de La Palma (Canarias).
Este tipo de fenómenos solares producen una explosión de radiación a través del espectro electromagnético, alcanzando energías comparables a mil millones de bombas de hidrógeno, pero gracias a la atmósfera de la Tierra y a la distancia a la que se encuentra el Sol no representan un peligro para la humanidad.
Además las llamaradas solares pueden trasladar el plasma de la superficie de nuestra estrella a velocidades de hasta 2.000 kilómetros por segundo, en lo que se conoce como 'eyecciones de masa coronal'. Estos eventos de gran alcance pueden conducir a alteraciones en el funcionamiento de los satélites y de las señales del GPS, así como también originar auroras boreales por su interacción con la atmósfera terrestre.
En Contexto:
Tormenta solar podría ocurrir en 2023 o 2024
El Sol tiene un ciclo promedio de actividad de 11 años, por lo que aumenta la probabilidad de que ocurra una tormenta de gran intensidad en 2023 o 2024, cuando se presente el próximo máximo de actividad solar, advirtió hoy el investigador del Servicio de Clima Espacial México, Luis Xavier González Méndez.