Antes de viajar a Kenia, Guillermo Martínez diseñó una nueva prótesis de brazo entero mediante fotos de personas con problemas de diferentes causas.
Guillermo Martínez, un joven graduado en Ingeniería en Madrid (España), diseñó brazos protésicos mediante una impresora 3D y viajó a Kenia, a través de la ONG Bamba Proyect, para entregar personalmente a las personas necesitadas de la tecnología.
El joven expresó que la iniciativa comenzó cuando compró una impresora 3D para aprender, y de pronto vio que existían empresas que utilizaban esta tecnología para hacer manos protésicas, pero no había modelo alguno para gente que no tuviera codo.
Antes de viajar a Kenia, Martínez diseñó una nueva prótesis de brazo entero mediante fotos de personas con problemas de diferentes causas, como quemaduras en el brazo o quienes presentaban amputaciones.
El dispositivo funciona introduciendo el brazo por la parte de arriba manteniéndolo estable mediante un arnés. La mano cierra y hace un movimiento prensil, se cierra y permite agarrar objetos sin problema.
"No me caben las palabras para contar una experiencia de este nivel, ha sido precioso e impresionante", expresó Martínez.
En Contexto:
Utilizan impresora 3D para crear un corazón que “late como si fuera real”
Este corazón artificial puede usarse para trasplantes y beneficiaría a millones de personas con problemas cardíacos.
Alrededor de 26 millones de personas en todo el mundo padecen de problemas cardíacos y, a esto, se suma la escasez de donantes de este órgano para pacientes que lo necesitan.
Si bien las bombas de sangre artificial ayudan a las personas con estos inconvenientes, un grupo de investigadores del centro ETCH de Zúrich, en Suiza, ha desarrollado el primer corazón flexible completamente artificial que late igual que uno real y que, en el futuro, podría usarse para realizar trasplantes.