El científico de la NASA y del Centro Aeronáutico Alemán Hans Zinnecker presentó hoy en Santiago el proyecto SOFIA, un avión con telescopio integrado que espera que surque en breve los cielos del sur de Chile, especialmente indicados para observar los elementos que este sistema suele analizar.
"Espero que la NASA y Alemania aprueben utilizarlo pronto en Chile. El cielo del sur del país es muy importante porque contiene el centro de nuestra galaxia y las Nubes de Magallanes, dos sistemas de menor tamaño. En los cielos del norte no están disponibles, por eso es importante ir al sur", aseguró Zinnecker a Efe.
En una conferencia en la Universidad Autónoma, explicó que el SOFIA (Stratospheric Observatory For Infrared Astronomy) es el observatorio aéreo más grande del mundo, un avión Boeing 747 con un telescopio de dos metros y medio de diámetro integrado.
"Es un satélite pero dentro de un avión. Está entre los dos limites, la Tierra y el cielo. y por eso conduce a observaciones únicas sobre la materia interestelar. Es decir, los gases, moléculas el polvo entre las estrellas o la materia que va a comprimirse y formar nuevos cuerpos y planetas", insistió el científico.
El avión telescopio, capaz de hacer observaciones "imposibles para los más grandes y poderosos basados en tierra firme", es un "milagro" de la ciencia, según Zinnecker.
"Es muy complicado. El avión tienen que tener una puerta para abrir y que el telescopio vea las estrellas. La puerta tiene el mismo tamaño que la de un garaje. Cuando se abre lo normal es que la nave se caiga, pero esta no lo hace. Es un milagro que la NASA ha solucionado a base de examinar el flujo del aire sobre la puerta", afirmó.
Además de este problema, el proyecto SOFIA también ha tenido que lidiar con otros inconvenientes que podían poner en peligro la misión.
"El telescopio es muy pesado y tiene que moverse para seguir las estrellas que queremos observar. No es fácil para un avión con una velocidad de 800 kilómetros por hora, pero lo conseguimos solucionar", incidió el científico.
Actualmente, la nave telescopio se encuentra en su base de operaciones de Moffett Field (California, EE.UU.), pero la científica chilena Natalia Inostroza se unirá al proyecto de Zinnecker y presentará una propuesta formal a la NASA para que el proyecto SOFIA surque pronto los cielos australes de Chile.