Los astrobiólogos que buscan entender dónde y en qué forma se podría encontrar vida en Marte están descubriendo que el desierto de Atacama en Chile, el más árido del mundo, podría contener algunas pistas importantes.
Desde una investigación de 2003 que examinó la vida microbiana en los "suelos semejantes a Marte" de Atacama, la astrobiología, ciencia que estudia la vida en la Tierra para comprender cómo puede formarse en otras partes del universo- ha crecido dramáticamente.
"Es mucho más barato que viajar a Marte", dijo Armando Azua, astrobiólogo chileno del Blue Marble Space Institute de Estados Unidos, quien creció en una de las pocas áreas pobladas de Atacama.
"El hecho de que es el más seco y el más antiguo del mundo, ha establecido que el desierto de Atacama es un lugar único donde la vida tuvo que sí o sí adaptarse a la falta de agua", agregó.
Pese a lo duro del ambiente, los científicos han encontrado vida, por lo general a nivel microbiológico.
"Hemos encontrados lugares igual de secos que Marte en la Tierra y que aun así están colonizados por una variedad de tipos de microorganismos distintos", dijo Azua.
Los científicos están investigando actualmente si los hongos u otros organismos podrían adaptarse y usar altos niveles de radiación ultravioleta como fuente de energía, de la misma manera que los encontrados cerca del sitio del desastre nuclear de Chernóbil en 1986.
El equipo de Azua identificó una parte de Atacama que era la más seca de todas, donde pueden pasar siglos sin lluvias. Los científicos escarbaron y encontraron una serie de prósperas bacterias.
"Si llegamos a demostrar que en el desierto de Atacama la vida no solamente es capaz de tolerar extremas desecaciones, sino que además de seguir funcionando en estado de secado, eso abriría tremendamente el espectro de posibilidades que podamos encontrar (vida)", aseguró el científico.
"No solamente en Marte sino que en otros lugares del universo", añadió.