Terence Crawford derribó a Amir Khan cuando apenas llevaban unos pocos golpes.
El puñetazo que le puso fin al combate fue bajo el cinturón.
Crawford retuvo el sábado su título welter por nocaut técnico cuando Khan no pudo continuar tras recibir un golpe bajo en el sexto asalto.
Crawford golpeó a Khan con la mano izquierda en la cadera derecha, y su rival se retiró a su esquina con gesto de dolor. Tras intentar superar el dolor durante unos minutos, su equipo dijo al árbitro que Khan no podía continuar.
“Vi que le estaba desmoronando. Era una cuestión de tiempo”, dijo Crawford.
Fue un final extraño y poco satisfactorio para el combate de primera línea ofrecido por ESPN en video bajo demanda, que provocó abucheos del público que había comprado 14.091 boletos en el Madison Square Garden. El último golpe de izquierda dejó a Crawford y al promotor, Bob Arum, con tiempo de sobra para hablar de la próxima pelea que quieren organizar.
“El combate que quiero ahora es Errol Spence”, dijo Crawford. “Cuando esté listo, puede venir a por ello”.
Crawford (35-0, 26 KOs) había noqueado a Khan en el primer asalto, pero los últimos asaltos habían sido competitivos, con golpes duros desde cerca de ambos luchadores.
El árbitro David Fields no pareció ver el último golpe bajo a Khan (33-5). Khan podría haberse tomado cinco minutos para intentar recuperarse, pero su entrenador, Virgil Hunter, tomó la decisión antes.
“No quería mandarle de vuelta ahí sin las piernas bien”, comentó Hunter.
Crawford ganaba 49-45 en las tarjetas de dos jueces y 50-44 en la del tercero.
“Me decepcionó que el equipo detuviera el combate de esa manera, pero Virgil es un gran entrenador y estaba cuidando de su boxeador”, dijo Crawford. “Sé que él no quería perder así”.
Arum creía que Khan podría haber continuado.
“Tenía cinco minutos para recuperarse”, dijo Arum. “Fue un golpe bajo accidental. Podría haberse recuperado (…) Pero estaba buscando un sitio donde caer”.
Khan, medallista olímpico de plata por Gran Bretaña en 2004, buscaba la que habría sido la mayor victoria de su carrera profesional. El excampeón de 140 libras podría haber buscado un combate con su compatriota Kell Brook, una pelea quizá más lucrativa y asequible, pero en su lugar aprovechó la oportunidad de enfrentarse a Crawford, de Omaha, Nebraska y considerado uno de los mejores boxeadores del momento.