El legado que Juan Manuel Márquez, cuatro veces campeón del mundo, le hereda al boxeo de México y del mundo es vasto: en 24 años de carrera fue campeón del mundo en cuatro diferentes divisiones, pero el nocaut sobre el filipino Manny Pacquiao fue la escena que marcó su carrera.
Luego de 36 asaltos fragorosos que protagonizaron en las tres primeras peleas -empate y dos polémicas decisiones para el filipino-, la noche del 8 de diciembre de 2012 en Las Vegas se presagiaba otro duro combate.
Tras una caída por lado y con el mexicano sangrando por la nariz, no se perfilaba un buen resultado para Márquez ante el llamado "Devorador de mexicanos", pero llegó aquel sexto asalto.
Ambos se sabían de memoria los movimientos del rival y fue Márquez quien preparó un potente derechazo al contragolpe a Pacquiao, quien entró con fuerza buscando al mexicano.
El filipino recibió el impacto y cayó fulminado. Márquez y todo México festejaban al máximo mientras Pacquiao permanecía boca abajo en la lona y lo reanimaban las asistencias.
El triunfo de uno y la derrota para el otro prácticamente determinaron el final de las carreras de ambos, y aunque los dos siguieron en activo, no volvieron a ser los mismos.
Márquez y Pacquiao construyeron una etapa brillante en el boxeo al enfrentarse en cuatro ocasiones, y aunque los veredictos de las tres primeras peleas fueron controvertidos, alimentaron la rivalidad y ésta ayudó al boxeo.
De la mano del experimentado hacedor de campeones mundiales Ignacio "Nacho" Beristáin, Márquez se abrió las puertas en Estados Unidos con su boxeo depurado y poder de puños, tanto que le apodaron "Dinamita".
Con Pacquiao fueron noches brillantes, pero Juan Manuel enfrentó también a Floyd Mayweather, ante quien perdió, y a los mexicanos Marco Antonio Barrera, Manuel Medina y Orlando Salido, al cubano Joel Casamayor y a los estadounidenses Juan Díaz y Timothy Bradley, entre otros.
Debutó el 29 de mayo de 1993 y, en poco más de 24 años de carrera, Márquez acumuló en 64 peleas con 56 triunfos, 40 antes del límite, siete derrotas y un empate.
En Estados Unidos combatió en 53 ocasiones, una en Indonesia y 10 en México.
Juan Manuel Márquez fue el último gran exponente en el boxeo mexicano, aquel que atrapaba a los aficionados frente a la televisión.
Llegó en la época en que aún brillaba Julio César Chávez, se construyó su lugar y se va cuando su cuerpo se lo pidió.
Márquez es el mejor ejemplo en el deporte mexicano de constancia, esfuerzo, perseverancia y, sobre todo, disciplina.
Juan Manuel, a unos días de los 44 años, colgó los guantes y ya camina rumbo a la leyenda.